La seguridad industrial se centra en la reducción de riesgos laborales en la industria. Mediante la prevención se busca proteger al empleado de diversas adversidades tanto a nivel físico como mental y emocional, así como el lugar en el que trabaja y el medio ambiente.

La empresa o el propio empresario son los encargados de proporcionar el equipo necesario para que el trabajador realice su actividad laboral en las condiciones de seguridad apropiadas según los requisitos que dicha actividad exija. Además, el empresario también debe ofrecer formación y entrenamiento para aprender a usar los equipos y tener en cuenta los riesgos que se pueden producir en su puesto de trabajo.

Si se invierte en la seguridad industrial se puede encontrar una serie de beneficios como la disminución de las interrupciones de la jornada laboral por accidentes o imprevistos, se reduce el ausentismo y al tomar medidas también se protegen tanto las herramientas como los recursos de la empresa.

Otros de los beneficios que encontramos los podemos aplicar al factor humano, ya que, si se despierta el interés en la seguridad de varios de los trabajadores, estos tendrán algo en común y tanto la moral como el sentido de pertenencia a un grupo aumentará, por lo que consecuentemente se mejorará el trabajo en equipo, la competitividad y la productividad.


Artículo creado con información de isotools.org.